Una buena idea de negocio es la base del éxito de cualquier proyecto. En este post te explico qué es una idea de negocio, qué requisitos debe cumplir para que tenga posibilidades de triunfar en el mercado y cómo puedes generar una idea de negocio para ponerla en práctica.
Resumen de contenidos
Idea de negocio
Todo proyecto de negocio se basa en la idea de fabricar un producto o prestar un determinado servicio para satisfacer las necesidades de un mercado a cambio de una contraprestación económica. De esta definición básica debes extraer tres conceptos clave:
- Tu idea debe estar enfocada a producir un determinado bien o prestar algún servicio.
- Debe existir un determinado grupo de personas o instituciones (mercado) que tenga una necesidad, la cual será cubierta por ti.
- Al producir o prestar el servicio debes generar el suficiente dinero para cubrir los costes de la realización del proceso y generar un beneficio suficiente que te permita vivir.
Por lo tanto, cuando tengas una idea de negocio lo primero que debes hacer es reflexionar si cumple con los anteriores puntos. Cualquier otra cosa que no se corresponda con las premisas anteriores no es una idea de negocio.
Cómo surge una idea de negocio
Una idea de negocio puede surgir de diferentes maneras:
Observando y analizando lo que te rodea
Hay personas que continuamente andan buscando posibles negocios allá donde van. Si tienes inquietudes y quieres montar algo observa con atención lo que te rodea y trata de encontrar esa idea en el entorno, a ser posible relacionada con el tipo de actividad que te gustaría realizar.
Estos acontecimientos crean lo que se denominan “nichos de mercado”: nuevas situaciones que generan nuevas necesidades y oportunidades de negocio.
Un claro ejemplo de ello es el cambio que han supuesto en nuestros hábitos de vida los teléfonos inteligentes o smartphones. Con su implantación en la sociedad se han creado multitud de oportunidades de negocio como la creación de apps o la obtención de ingresos por publicidad.
Detectando una necesidad
Este es un principio básico del marketing: si detectas una necesidad (el mercado necesita algo) y la satisfaces convenientemente (buen producto o servicio) y a tiempo (antes que tus competidores), tu idea seguramente será un éxito. Se trata de encontrar alguna necesidad en el mercado que no esté siendo cubierta.
Un ejemplo sería la ausencia de una panadería en una urbanización de reciente construcción en las afueras de tu localidad.
Detectando una deficiencia en algún producto o servicio
Consiste en descubrir que un producto o servicio no se está ofreciendo convenientemente o que podría hacerse de mejor manera. Esa deficiencia puede estar en cualquier punto del proceso que va desde la producción hasta la adquisición del bien o servicio por parte del consumidor, es decir, puede que la idea se base en hacer cambios en la manera de producir un producto, en distribuirlo de una manera diferente o simplemente en facilitar su compra por parte del cliente.
Un ejemplo son las magdalenas empaquetadas individualmente, la mantequilla en porciones para bares y restaurantes o los programas informáticos en los que pagas según las funciones que utilices.
Analizando aquello que sabes hacer
Detecta qué sabes hacer y puedes poner en marcha en forma de actividad empresarial. Puede que veas factible la posibilidad de desarrollar la actividad que realizabas en anteriores trabajos por tu cuenta o por ejemplo dedicarte al diseño gráfico o a dar clases particulares si has estudiado para ello y se te da bien hacerlo.
Convirtiendo tu hobby en actividad económica
Consiste en obtener ingresos por hacer algo que te divierte y te gusta hacer. Al dedicarte a cualquier actividad que verdaderamente te gusta, sin darte cuenta te conviertes en un verdadero experto puesto que profundizas en la misma pasándotelo bien (nadie sabe más de pesca que un apasionado pescador).
Innovando
Inventando algo práctico o necesario que la gente pueda comprar. ¿El chupachups? Si, el chupachups.
Cualquier cosa que inventes y tenga demanda puede ser la base de tu negocio.
Utilizando técnicas de generación de ideas
Existen diversas técnicas cuya finalidad es la de propiciar el nacimiento de nuevas ideas. Puedes encontrar información acerca de ellas y utilizarlas.
Algunos ejemplos son: brainstorming, mapas mentales, listado de atributos, biónica, etc.
De manera aleatoria e imprevista
Por último, esa idea de negocio que te gustaría llevar a cabo puede surgir cuando estés viendo la televisión, leyendo un periódico, en un viaje o en una reunión de amigos.
Recuerdo una noche que estábamos en casa de unos amigos cenando y uno de ellos comentaba que no existía en la localidad una empresa que fabricara pan de calidad. ¿Podría esa ser una buena idea de negocio?
En el pack de recursos para emprender, aparte de otros recursos, tendrás acceso a información para definir y poner en marcha tu negocio, analizar su viabilidad y estructurarlo adecuadamente para salir al mercado con seguridad
Características fundamentales de una buena idea de negocio
Una vez que hemos visto cómo surgen las ideas de negocio vamos a intentar determinar si tu idea podría llevarse a la práctica, si podría funcionar en la vida real. Muy probablemente se te haya ocurrido no una, sino multitud de, en principio, buenas ideas de negocio.
Debes saber que no todas las ideas son susceptibles de materialización en una empresa ya que para ello es necesario que posea unas determinadas características. Por ello, debes analizar con detenimiento cada idea de negocio que tengas, descartar aquellas que no sean óptimas y seleccionar las que te parezcan más apropiadas.
Para seleccionar esa idea que podría tener éxito es importante que conozcas las características que debe cumplir una buena idea de negocio. Estas características son:
La idea ha de ser novedosa, original, necesaria o útil para la sociedad
- Novedosa (no hay nada en el mercado que se le parezca)
- Original (existen cosas parecidas pero no como lo que se te ha ocurrido)
- Necesaria (el mercado la está demandando)
- Útil (aporta valor al consumidor).
Para encontrar una idea que cumpla con alguna o varias de las anteriores características no estás obligado a realizar un gran descubrimiento o reinventar la rueda, sino que basta con que ofrezcas algo que no se esté ofreciendo, mejores algún producto o servicio ya existente o lo ofrezcas de una manera más atractiva o útil.
Su desarrollo debe ser factible
Debes ser capaz de ofrecerla al mercado, de materializada en un determinado producto o servicio.
Esto es muy importante: lo que vayas a hacer debes poder hacerlo y hacerlo bien.
Ha de ser rentable
Debe generar los ingresos suficientes como para cubrir los gastos que genera su desarrollo y permitirte un beneficio suficiente para poder vivir.
Debes contar con los fondos necesarios para ponerla en marcha
Estima el dinero necesario para llevarla a la práctica y cómo puedes conseguir esos recursos.
Debes tener la certeza de que el proyecto en el que estás pensando te atrae, te motiva, te gusta
Debes creer firmemente en tu idea, en caso contrario, cuando vengan las adversidades (que vendrán) te faltará la fuerza, la convicción y el ánimo suficiente para seguir adelante.
Analiza tu idea y comprueba si cumple con los anteriores puntos. Si es así, en principio, tienes entre manos una buena idea de negocio.
¿Qué hacer cuando tengas una idea de negocio?
Cuando tengas una idea seria de negocio empieza a recoger información sobre ella. Da respuesta a los siguientes aspectos de la misma:
- Piensa si encaja con la necesidad o necesidades que tienen tus potenciales clientes.
- Descubre si existen profesionales o empresas que ya las están satisfaciendo.
- Determina cuánto puede costar llevar esa idea a la práctica.
- Determina el dinero que ese mercado estaría dispuesto a pagar por tus productos o servicios.
Manuel Liberal
Soy la persona que está detrás de Formando Empleo. Desde 2009 ayudo a mis clientes e imparto formación relacionada con la Administración y Creación de Empresas, WordPress y Orientación Laboral.
Formo parte del fichero de expertos docentes de la Junta de Extremadura y de Andalucía y he colaborado entre otros con la Agencia Tributaria, la Universidad de Extremadura, Eplus Consultores o BBVA.